El periodo medio de posesión de una vivienda en España se situó en cifra récord: 16,4 años.
La escasa producción de nuevas viviendas en España el año pasado ha hecho aumentar considerablemente el tiempo que mantienen las personas sus casas. La poca producción ha limitado opciones de los compradores a la hora de cambiar de domicilio.
Los últimos datos de los Registradores de la Propiedad señalan que el periodo medio de posesión de una vivienda en España se situó en cifra récord: 16,4 años. Más de dos veces por encima del promedio registrado tras el estallido de la burbuja inmobiliaria. Desde que en 2009 este dato tocó los mínimos de 7,3 años de media, este indicador ha ido creciendo a lo largo de los años, llegando a duplicarse.
Estos datos se atribuyen a la falta de oferta inmobiliaria, principalmente de nueva obra, que aunque es verdad que está mejorando, tiene un volumen muy bajo. En los últimos años, una de cada cinco compraventas que se hacían eran de obra nueva, lo que significa que la mayor parte de las operaciones se han realizado en el mercado de segunda mano.
También el hecho de que la banca haya endurecido sus requisitos a la hora de conceder préstamos, hecho que ha provocado que muchas personas busquen un nuevo hogar más adaptado a sus necesidades.